Carta abierta

Yo, soy como vos, soy emplead@ de un organismo público, soy emplead@ domestic@, soy quien te atiende en el kiosco, soy estudiante, soy del barrio, la escuela, el comedor… yo soy todos ellos, yo también soy parte del pueblo. A vos que sos como yo te hablo. El 22 de noviembre, volvemos a decidir por nuestro futuro.
La palabra “cambio” es seductora, aunque esta gente no diga por qué cosa sería el trueque. En “CAMBIEMOS" no lo dicen. Dan por hecho que cambiar es bueno, como Videla, como Martínez de Hoz, que ¡vaya si cambiaron!.
Lo decían, antes, cuando cualquier disparate era gratis “La gente quiere un cambio”. El Asesor dijo: “digan cambio, nada más, aunque no tenga nada que ver con la conversación en curso”.
Yo les pido que se hagan la pregunta: ¿por qué cambiarían el bienestar conseguido en estos años?, ¿Por esa patética mentira que Macri dice: “amo a la justicia social? Si, da risa… si no fuera tan dramático…
¿O por “no voy a anular nada de lo que funcione”? ¿O por el “aprendí mucho del Gral. Perón”?
No olviden los dichos de antes, “privatizo YPF el primer día”; “el despilfarro en Ciencia y Tecnología”; “voy a terminar con todos los planes”; “los Derechos Humanos son un curro”; “lo que diga Griesa, hay que hacerlo”; etc, etc, etc.
Estas cosas, las dijo durante años, son sus verdaderos pensamientos. Son los principios que está dispuesto a imponer si llega a la presidencia.
No se confundan ni se engañen. Si gana MM vamos a tener a un Gerente General que ejecutará las órdenes de Magnetto y sus secuaces.
Si el domingo votaron a “Cambiemos” sin, antes, hacer estas consideraciones, el 22 no repitan el error.
Si votaron en “blanco” porque les “da lo mismo cualquiera”, sepan que no da igual seguir con los derechos adquiridos que perderlos. Eso está en juego.
Nada menos.

Scioli es 100% Scioli

A los PERONISTAS les digo

 ¡SÓLO TENEMOS QUE RECUPERAR LA INICIATIVA!
Esa decisión que nos ha caracterizado y que, parecería, que algunos de nosotros ha dejado a un costado olvidando nuestro principio de que nada se consigue sin esfuerzo.
¡Esa mística, tan nuestra, debe volver a notarse “en la cancha”!
¡Nunca un triunfo está asegurado como para aflojar en la voluntad arrolladora!
¡Desde este minuto y hasta el 22/11 no nos cabe otra cosa que militar y militar!
¡SE ACABARON LAS POSIBILIDADES DE REVANCHAS!
¡O SOSTENEMOS ESTE PROYECTO AHORA O PERDEMOS PARA SIEMPRE!
¿PODEMOS ENTENDER EL DRAMATISMO DE ESTO?
Elijamos sólo estas 5 conquistas, de las decenas logradas, para “trabajar” sobre ellas en estas 4 semanas de MILITANCIA PERSONALIZADA sobre amigos, parientes y vecinos.
EL 98% de los argentinos con la edad correspondiente ESTÁN JUBILADOS. Cobran todos los meses, reciben aumentos 2 veces por año, viven mejor, consumen, gastan su dinero.
Hay paritarias 2 veces al año que permiten que nuestros sueldos se mantengan poderosos. Podemos planificar, comprar lo que nunca hicimos, ir de vacaciones. Gastar, alimentar el circuito productivo.
ASIGNACIÓN UNIVERSAL POR HIJO. La matrícula escolar aumentó notablemente. Las madres tienen dinero para alimentar a sus hijos, van al súper, compran.
LA DESOCUPACIÓN LLEGÓ AL 6,5%. En 2003 llegó al 25%. Hay 5.000.000 de trabajadores que, con sus familias, agrandaron el bendito mercado interno sobre el que se basa nuestro proyecto.
PROCREAR OTORGÓ 120.000 CRÉDITOS PARA LA VIVIENDA HASTA 2014. SON MÁS DE 500.000 PERSONAS CON TECHOS NUEVOS. CASI TODOS DE LA QUEJOSA CLASE MEDIA QUE PUSO SUS “PRINCIPIOS” ENTRE PARÉNTESIS Y TOMÓ LOS PRÉSTAMOS. ENHORABUENA, PARA EL BUEN FUCIONAMIENTO DEL PROGRAMA.
En fin, compañeras, compañeros, SON ELLOS O NOSOTROS. SON NUESTROS HIJOS O SUS CAMPOS, NUESTROS VIEJOS O SUS BANCOS. ASÍ DE TAJANTE, ASÍ DE TERMINAL, ASÍ DE GRAVE.
LOS ABRAZO, COMO SIEMPRE. ES UN ESFUERZO MÁS EN EL QUE NOS JUGAMOS TODO.
¡Hasta la Victoria!
SCIOLI ES 100% SCIOLI

Promesas de campaña

Quizás haya sido Sergio Massa el “culpable” de que esta campaña resultara tan larga.

Cuando en 2013 tocó el cielo con las manos creyó que debía seguir, sin interrupciones, hasta el Paraíso. Arrastró a todos los que no quisieron “quedarse atrás”.

Lo cierto es que fueron dos años en los que el que más sufrió la erosión de aquel capital, tan endeble, tan coyuntural, fue el propio jefe del FR.

 

Desde las PASO, con las cartas dadas vuelta, los candidatos se esfuerzan por conseguir algún voto más, prometiendo.

Todos prometen.

 

Pero hay prometedores y prometedores.

 

Massa, últimamente en un tono suave y “sobrador” tan artificial  como lo fue aquél ridículo “¿Taj´ahí?”, dice que va a terminar con la droga en la Argentina. Claro, no dice cómo: no lo sabe, como nadie.

Si bien no ha logrado recuperarse del golpe del yunque queWikileaks soltó sobre su espalda al ventilar su traición a la Patria (porque, en realidad, la felonía fue hecha a la Nación, antes que a la Presidenta), parece dispuesto a seguir prometiendo.

 

 

Mauricio Macri, atrevido, irrespetuoso, se apropió del “Vengo a proponerles…” de Néstor Kirchner para prometer 1 millón de créditos hipotecarios. “¿Con qué herramientas te ganás la vida?”

Insiste con “el cambio” que Durán Barba inculcó y que, a la luz de sus 8 años de gestión, no significa progreso: en la CABA se mueren más niños y se subejecutan las partidas de ¡salud y educación!

¿Quién puede confiar en expectativas creadas por este inconsciente responsable de los recientes escándalos que conocemos? Nadie. Ni los que van a votarlo, que lo harán sólo por conveniencia (los poderosos reales) y por xenofobia (los que no toleran ver a un pobre a su lado en el supermercado).

 

Daniel Scioli tiene 12 años de promesas cumplidas detrás de sí, cosa que lo avala cuando dice que continuará con algo o cuando asegura que pondrá en marcha un programa. La gente sabe esto. Lo sabe en carne propia, por estar disfrutando de infinidad de realidades que una vez fueron proyectos. Y, se sabe, pasada una década de acostumbramiento a lo bueno, nadie va a permitir que le quiten lo que ya es propio.

El FpV (escuela o satélite más o menos por inaugurar o lanzar), muestra la foja rica en realizaciones que todos conocen, más allá de que la necedad decida no aceptar.

 

Cuando las palabras mueran, los ciudadanos harán lo que les corresponde sabiendo que son quienes deciden, votar.

 

En el “cuarto oscuro” y en soledad elegirán en libertad. Considerarán qué quieren en lo personal y para los demás. Será importante, como nunca, que lo hagan a conciencia.

Marcela Pastore- OCT 2015